Gemma, una mujer de mediana edad, y Pietro, su hijo adolescente, inician un repentino viaje a Sarajevo para acudir a la exposición fotográfica póstuma de Diego, el padre que Pietro no llegó a conocer. En este viaje, Gemma rememorará la época más dura, cruel y convulsa de su vida, la guerra de Bosnia. Pero también sentirá el recuerdo de aquellas gentes, de aquella ciudad que, inmersa en el caos más absoluto, la hizo sentir viva.
Este es, a grandes rasgos, el argumento de “La palabra más hermosa“, la última obra de la escritoria italiana Margaret Mazzantini, publicada en España por la editorial Lumen.
“La palabra más hermosa” es todo un puñetazo en la conciencia. Un puñetazo de acero, pero en guante de terciopelo. Capaz de sobrecoger al lector a través de lúgubre parajes bélicos surgidos de lo más oscuro del alma humana para, acto seguido, enseñarle un recobeco del paraíso en medio de aquel infierno.
Destaca también por su magistral uso del tiempo, saltando del presente al pasado, para mantener la suave cadencia de la historia, y tratarlo como una circunstancia más, sin que en ningún momento complique la historia.
Finalmente, y a modo de personalísima opinión mencionar que, pese a tratarse de una historia exquisita sensibilidad, es quizás un tanto femenina. Me explico, además de ser un libro escrito por una mujer y cuyo protagonista principal es también otra mujer, en ocasiones el transcurso de los acontecimientos gira en torno a sentimientos con ciertos matíces más bien propios del sexo bello.
Os dejo un video promocional de la novela:
Esta entrada es una reseña patrocinada por Bloguzz.com, quienes muy amablemente me cedieron el libro para que lo reseñe.