Siempre he considerado a Opera un navegador excelente. Rápido, estable, respetuoso con los estándares y pionero en implementar muchas prestaciones que después han copiado o desarrollado el resto de navegadores. Por eso no acabo de entender porqué no tiene las cuotas de popularidad del resto de sus rivales.
La nueva versión 9.6, sin demasiadas innovaciones destacables, sí que supone un perfeccionamiento de las características que le han hecho estar a la vanguardia de esta clase de programas. Destacan las siguientes:
- Opera Link: Sincroniza marcadores, historial, búsquedas y notas no solo entre diferentes ordenadores que ejecutan Opera sino incluso entre ordenadores y dispositivos portátiles como teléfonos móviles o PDA’s.
- Mouse Gestures o gestós del ratón. Desde que los descubrí se han convertido en un indispensable de mi navegación diaria. Agiliza enormemente el proceso de retroceder entre páginas, cerrar pestañas, recargar páginas y demás acciones habituales.
- Administrador de sesiones: Poder guardar todas las páginas abiertas durante la búsqueda de un tema concreto (por ejemplo un viaje o la compre de un producto) es una delicia.
- M2, cliente de correo: Muy perfeccionado, con el inconveniente o ventaja (según el uusario) de estar integrado en el propio navegador. Algunas de sus características ,como la respuesta rápida o en cierto modo las estiquetas, fueron copiadas por otros servicios como el archiconocido GMail.
- Administrador de contraseñas: La varita mágica es una forma segura, eficaz y usable de recordar nuestras contraseñas. Preferible al sistema, un tanto tosco, de Firefox.
- Speed dial: En realidad no es nada del otro mundo, pero tener una especie de miniaturas de los enlaces que más visitamos cada vez que abrimos una nueva página o pestaña es práctico y nada intrusivo.
- Diccionario, enciclopedia y traductor integrado en el menú contextual. Utilísimo, sobretodo si, como yo, navegáis bastante por páginas extranjeras y vuestro dominio del idioma de shakespeare no es nada del otro jueves.
- Búsqueda rápida de página a través de una sola tecla (la tecla “.”).
- Quickfind: Algo así como la Awesomebar de Firefox 3 pero elevada al cuadrado, pues permite encontrar una url que previamente hemos visitado simplemente tecleando cualquier palabra que hubiera en su contenido, y no solo en el titulo de la página.
Sin embargo también tiene aspectos negativos, algunos más que otros:
- El motor de render, pese a ser uno de los más rápidos y avanzados, es incapaz de mostrar correctamente ciertas webs. Probablemente en la mayoría de las webs esto sea un problema originado por los propios desarrolladores, al utilizar técnicas no estándars y no testear, ni si quiera probar, las páginas (soy consciente del tedio que supone) en este navegador.
- Las extensiones de Firefox son un gran invento que dota al navegador de una flexibilidad y unos niveles de personalización sin parangón. Incluso Google Chrome ha anunciado que también implementará un sistema de extensiones, aunque haciendo especial hincapié en la estabilidad. En cambio los widgets de Opera son poco menos que una curiosidad.
He leído una entrevista en la que uno de los desarrolladores de Opera deja entrever que en el futuro implementarán un sistema similar, que incluso actualmente es posible de realizar extensiones, pero es una característica muy poco documentada. Tal vez un SDK, como han hecho con los widgets, solventara el problema.
De todas formas, es cierto que muchas extensiones que instalan los usuarios de Firefox, son características ya implementadas en Opera de serie. - Algunas características, como la personalización del menú contextual, son complejas de modificar pues carecen de interfaz de usuario y se han de editar archivos de texto de cierta complejidad e inaccesabilidad.
- La combinación de teclas para abrir un enlace en una nueva pestaña en segundo plano debería ser personalizable, por aquello de mantener una cierta coherencia entre los navegadores.
- La ampliación del navegador (la lupa), ha quedado un tanto desfasada. A diferencia de Firefox por ejemplo, las imágenes ampliadas se muestran sin suavizado, sin ningún tipo de filtro bilineal o similar.
- El cliente de Bit Torrent, al contraro que el de Mail (M2), no puede competir con programas especializados.
- El corrector ortográfico no va resaltando los errores mientras escribimos sino que es necesario realizar una corrección completa una vez hemos acabado de escribir.
Y también algunos problemas específicos de la versión para Mac OSX:
- Imposibilidad de efectuar autoscroll mediante botón central del ratón o en su defecto, puesto que en Mac se suele utilizar para mostrar el Dashboard, mediante combinación de teclado y mouse (en Firefox, por ejemplo se realiza a través de la combinación “Command + Botón central del ratón”).
- Algunas páginas de videos en Flash, como el canal HD de Vimeo o Joost, se visualizan lentas y poco fluídas, incluso en equipos potentes. No he podido confirmar si este error también sucede en Windows.
- Ha desaparecido el scroll suave (aka Smooth scrolling).
En cuanto a su relativa falta de popularidad, parece que están empezando a moverse. Son coscientes de que la los propios usuarios son la mejor herramienta de marketing, y en
Finalmente una observación personal. Opera es un navegador. Un navegador es un programa que permite visualizar páginas web. Asi de simple. Por eso resulta curioso que un software, a priori tan generalista pero que en ocasiones acompaña a los usuarios durante muchas horas al dia, no se libre de las rencillas de “fanboys” mostrándose partidarios y defensores a ultranza uno u otro navegador.
En definitiva, os recomiendo que le déis una oportunidad. No os arrepentiréis.