Huyen desde hace tanto tiempo, que han olvidado la estación donde se conocieron. Fue hace miles, millones de kilómetros. Por aquel entonces ni siquiera habían sido forjados los primeros trenes, pero cuando se reflejaron el uno en el otro, el universo entero pareció conspirar para que se abrazaran. La suya, no es sin embargo una historia de dichas. Pues apenas estuvieron a punto de alcanzarse, fueron separados por una legión de maderos. Desde entonces tratan de escapar. Surcan horizontes desconocidos mientras pierden retazos de memoria por el camino, pero los duros maderos siempre les dan alcance . Sueñan la vía izquierda y la vía derecha en unirse algún día… Acaso escucharan el nombre de la estación que dará fin su huída: Esperanza. (Taken with instagram)